Descubre la historia de Villa Iulia wines

Villa Iulia es el sueño con el que Antonio Florencio Nieto combatía las largas jornadas de vendimias alrededor del mundo. Todo comienza en 2008 cuando descubre su pasión por la enología, en ese momento tiene claro que pasaría los siguientes años de su vida viajando, recopilando información y experiencias por diferentes países para tener una visión de la enología mucho más compleja, esta aventura le llevaría a conocer distintos terroir y filosofías de elaboración alrededor del mundo. Tras 12 años elaborando vinos, habiendo trabajado en 8 países (España, Italia, Chile, Estados Unidos, Nueva Zelanda, Austria, Australia y Serbia) y con 16 vendimias a sus espaldas, llegó el momento de materializar ese sueño.

mapa villa iulia arpa transparencia arpa transparencia arpa transparencia arpa transparencia arpa transparencia arpa transparencia arpa transparencia Periodo: Mar 2011 - Jun 2011
Bodega: Viña Calyptra (Termas de Cauquenes, Cachapoal, Chile)
Vino Favorito: Gran Reserva Chardonnay

Es sin duda uno de los viajes que mas me marcó en la vida, no solo por ser la primera vez que salía al
extranjero sólo, ni por ser la primera vez que salía de Europa, si no por lo que me deparaba el destino.
No tenía ni idea de Chile ni de sus vinos, pero la suerte me llevo a una bodega donde trabajaría para
una de las personas que más me han marcado en el mundo de la enología, François Massoc. Parece
que fue ayer cuando me recogió en el aeropuerto de Santiago y me llevo a la bodega, era de noche y
no se veía nada, me acosté y cuando me desperté… estaba en un pequeño valle a orillas del río
Cachapoal rodeado de los Andes, sin coche y a unos 6 km del pueblo mas cercano (Coya), primer
ataque de pánico de mi vida! A unos 11000km de mi casa en medio de la nada. Con el paso de los
días empecé a disfrutar lugar, de los viñedos y de los vinos. Pero sobre todo, empecé a aprender, de
hecho aprendí tanto que tarde años en asimilar todo lo que pasó en esos meses. Las catas de uva y
mosto, el procesado de la uva, las etapas de la fermentación, la sutileza del pinot, la protección al
Sauvignon, la complejidad del Chardonnay. Unos vinos que a día de hoy recuerdo como un
espectáculo, y un estilo de elaboración que hice propio; pero no solo me lleve conocimientos técnicos,
también una cura de humildad que me hizo mejor persona y me preparó para poder afrontar el largo
viaje que todavía me quedaba por delante. También aprendí que si no has tirado nunca con arco, no
aprendas con el arco de tu jefe, te debo la reparación. François es mucho François!

Periodo: Ago 2009-Oct 2009 y Ago 2010-Nov 2010
Bodega: Cantina Teanum (San Severo, Puglia, Italia)
Vino Favorito: Gran Tiati

Mientras daba mis primeros pasos en el mundo de la enología, tuve la suerte de poder trabajar
dos vendimias en esta bodega, donde iba asentando todos los conocimientos que iba adquiriendo
con mis estudios. Una experiencia irrepetible, como el viaje en coche desde Sevilla a San Severo
(2700km) con mis amigos y compañeros Manuel Carrizosa y Simbad Romero, con los que también
compartí esa vendimia. Un lugar donde aprendí de las variedades Italianas, del carácter cálido de
los vinos del Sur de Europa y donde cometí el primer error en mi carrera, pensar que vista una
bodega vistas todas… Por suerte, otra de las gratas sorpresas de este viaje fue conocer a Donato
Giuliani, un enólogo sensacional, al que considero un amigo y que me animó a romper fronteras y
a continuar con este viaje recién comenzado, he de decirte que tenías razón Donato, es necesario
viajar y conocer otras formas de trabajar y entender el vino. Aun recuerdo los aromas del Novello
(vino tinto joven con maceración carbónica) o la Falanghina y el Chardonnay fermentando en
barrica; y como olvidar el aroma a cacao de los tintos en fermentación y mi primer contacto con
la uva Primitivo (Zifandel) ni las largas esperas a que llegaran los remolques desde Manduria.
Periodo: Jul 2011-Ago 2011
Bodega: Arca de Vitis (Valle de Güímar, Tenerife, España)
Vino Favorito: Contempo Malvasía Seco

Llegamos a las islas! Con una energía que solo se tiene antes de llegar a los 30, en
el 2011 me propuse hacer tres vendimias en un año, y aprovechando que en
Canarias la vendimia se adelanta bastante, allí que me fuí, a conocer los suelos
volcánicos. Llegue a mediados de Julio, y bueno, dependiendo de en que lugar
estuvieras podría haber sido mitad de Octubre, de Febrero o de Mayo; increíble los
cambios climáticos y los microclimas de esta maravillosa isla. La bodega estaba
enclava en mitad del valle de Güímar, cuando mirabas hacía el mar se veía una
extraña montaña en la costa, era el volcán del Socorro, poco a poco descubrí que el
Teide no era el único volcán de la isla. Los viñedos de la bodega estaban sobre una
lengua de lava negra, la de cosas que te descubre google maps, y los vinos que de
allí salían tenían una mineralidad y salinidad que jamás volví a encontrar en un vino.
No sólo encontré disfrute en sus vinos, la playa de la viuda, los amigos que hice
(Bentorei a la cabeza), los bocadillos de carne con mojo picón del Bar Chicho, la
romería y fiestas de Arafo. Un lugar donde el vino está a la altura de su gente y sus
parajes. Una estancia corta e intensa.

Periodo: Sept 2011-Dic 2011
Bodega: Imagery Estate Winery (Valle de Sonoma, California, Estados Unidos)
Vino Favorito: Imagery Pinot Noir

Estados Unidos es otro mundo, parece igual que cualquier otra región productora de vinos del mundo pero no lo es. Pero
vayamos por parte, este viaje comienza de manera muy emotiva despidiéndome de mis amigos de madrugada en la feria
de Guillena, sin dormir y apenas dos horas después, el vuelo Sevilla-Madrid, escala de una hora y dos vuelos más por
delante. El primero, Madrid-NY, 11-Sep-11 justo 10 años después del 11-S en un vuelo con destino NY, difícil de dormirte;
el segundo, NY-San Francisco, este ya sin equipaje facturado, porque me lo había dejado en el aeropuerto de NY, por
suerte lo recuperé a los dos días. Y ya por fin en la bodega, empezamos a descubrir lo que me esperaba. El modelo de
enoturismo de California debería de imperar en todas las regiones vitivinícolas, me fascinó ver como las bodegas se
asociaban para crear rutas del vino, una maravilla los ‘tasting room’ de las bodegas, donde puedes catar los vinos o
comprarte pelotas de golf con el logo de tu bodega favorita! Mi bodega, en particular, iba por el camino del arte, todos los
diseños de las botellas estaban inspirados en pinturas que también vendían en todo tipo de productos. La enología no es
muy diferente, técnicas modernas aplicadas a conceptos tradicionales, los vinos no me parecían excesivamente
maderizados, salvo el Pinot. Lo mejor que me llevé de esta experiencia fue, sin lugar a dudas, el desarrollo del
enoturismo de la región.
Periodo: Feb 2012-Jun 2012
Bodega: Brightwater Vineyards (Brightwater, Nelson, Nueva Zelanda)
Vino Favorito: Lord Rutherford Sauvignon Blanc

Salí de Sevilla un lunes a las 11 de la noche, llegue a Nueva Zelanda un viernes a las 10 de la noche y a la bodega el domingo a las 2 del mediodía, ese es el resumen de un viaje a las antípodas en bus-tren-barco-avión cuando no se tiene mucho presupuesto, y algo que nunca olvidaré jamás fue el primer pensamiento que se me paso por la cabeza nada mas pisar territorio kiwi: “Todo el mundo que conozco ahora mismo está bocabajo!” Nunca pensé que el vino me llevaría al lugar más lejano de mi casa en el que jamás he estado. Pues allí estaba, en un lugar donde el sol quemaba más que en Sevilla y donde los viñedos estaban cubiertos por redes para evitar que los pájaros se comieran la uva. Nueva Zelanda es un país mágico en el que los colores cobran una vida difícil de imaginar, si esa luz hacía especial la vida, ¿cómo serían los vinos allí? Pues del mismo modo que el verde es más verde y el azul más azul, los aromas son más aromas; y nadie como Tony Southgate sabía cuidar de ellos. Tony era el enólogo de la bodega, joven y con las ideas muy claras, se divertía haciendo vinos y los quería hacer de la mejor manera posible, me enseño a trabajar con un uso meticuloso de los gases, sus vinos eran pura elegancia. Al mes de estar allí, Tony fue galardonado con el premio Enólogo del año en Nueva Zelanda y su Sauvignon Blanc como el mejor vino. En lo que a mi respectaba estaba en el camino correcto y estaba aprendiendo de muy buenos maestros!
Periodo: Sept 2012-Dic 2012 y Jul 2013-Mar 2015
Bodega: Hajzan Neumann y Wieninger (Viena, Austria)
Vino Favorito: Gemischter Satz Weissenberg y Chardonnay Gran Select

Tenía claro que ya tocaba hacer vino en una zona con clima continental, y apareció Viena. Seamos claros, después de haber pasado los dos últimos años en zonas rurales, la llegada a Viena fue una bocanada de aire fresco. La bodega estaba situada en Heilingestadt, en el borde norte de la ciudad, los viñedos terminaban donde empezaban las calles, era el barrio donde vivía Beethoven, un sitio maravilloso a 10 min en metro del centro de la ciudad. Los viñedos guiados de manera biodinámica, estaban sobre una colina sobre la que se veía toda Viena, toda una estampa. Los vinos blancos eran un espectáculo, lógico, pues la calidad de la uva era excepcional y todo esto se disfruta mucho mas porque lo acompañas de una vida metropolitana con una cantidad ingente de cosas que hacer en la ciudad. Viena es de esas ciudades que no olvidas, y mas si creas una familia de españoles haciendo carrera en el extranjero; además de la experiencia, lo mejor que me traje de Austria fueron los amigos, que a día de hoy siguen siendo muy importantes en mi vida. Ya por febrero del 2014, la bodega donde trabajaba fue comprada por Wieninger, casi con total seguridad, la mejor bodega de Viena; y la suerte de nuevo me sonrió, ya que empecé a trabaja para Fritz Wieninger, una persona que me hizo ver la elaboración de los blancos de una forma diferente. No solo tuve la suerte de cruzarme con Fritz, también con Luis Teixeira enólogo portugués muy rodado con el que compartí mi experiencia en Wieninger y que aportó mas seriedad a mi trabajo. Claramente una de las mejores etapas de mi vida.
Periodo: Feb 2013- Jun2013
Bodega: Bremerton Wines (Langhorne Creek, South Australia, Australia)
Vino Favorito: Old Adam Shiraz

Habiendo aprendido en mi viaje el año anterior a Nueva Zelanda, esta vez invertí un poco mas en los billetes de avión, con una única escala en Dubai (de 14h eso sí, aunque me permitió visitar la ciudad). Y de nuevo la suerte me acompañaba, al menos en la faceta enológica (pues tarde en ver un Kangaroo más de un mes), ya que fuí a parar a una bodega con los vinos tinto con mas concentración con los que he trabajado; el Shiraz australiano es algo admirable. La bodega se encontraba cerca la costa junto al lago Alexandrina, y los vinos no tenían nada que ver con los de la cercana Adelaide Hills. El trato recibido de la familia Wilson fue espectacular, si alguna vez tengo una bodega prometo hacer comidas todos los domingos de vendimia como lo hacíamos en Bremerton, te hacían sentir parte de la familia. Rebecca, la enológa, es una persona cercana, con sentido del humor y una gran profesional, tenía muy claro todo lo que quería y como lo quería, y con razón, sus vinos están a otro nivel. Y Tom, su marido y viticultor, tenía su propia marca de vinos The Pawn Company, donde elaboraba vinos de las más variopintas variedades de todo el mundo. También hubo tiempo de hacer cerveza artesanal con Matt, segundo enólogo de Bremerton, y de viajar. Es más especial el que hice con mi amigo y socio en La Quinta Vendimia, Narciso Ossa, con el que nos adentramos en el continente australiano en un viaje en coche de 3800km en una semana, que tras cruzar un desierto inmenso, nos llevo a Alice Springs.
Periodo: Sept 2015-Jun 2017
Bodega: Toplicki Vinogradi (Gojinovac, Valle del Toplica, Serbia)
Vino Favorito: Epigenia Prokupac

La bodega se situaba a unos 50km de distancia de la ciudad de Nis, donde nació el emperador romano Constantino, el primer emperador cristiano. Serbia es un país del que tienes que conocer su historia si quieres entender todo lo que te rodea, con gente muy hospitalaria que mientras menos tienen mas te ofrecen y con un tesoro vitivinícola único, la Prokupac. Cuando llegue no había escuchado hablar nunca de esta variedad, y a día de hoy, aún me pregunto porque esta variedad no se internacionaliza; dan unos vinos intensos, complejos, especiados y con fruta negra. La mayor peculiaridad que tenían los viñedos era la de la lucha constante contra la humedad; la cercanía con el río Toplica propiciaba que por las mañanas un río de niebla flotará sobre el cauce del río, y en un buen número de ocasiones esa niebla subía hasta los viñedos provocando que la humedad en la viña fuera altísima. La bodega era un edificio moderno de 5 plantas excavadas en una colina, donde la única cara del edificio que no estaba empotrada en la colina, estaba llena de cristaleras; la estructura de la bodega era circular y cada planta era un paso mas en la elaboración del vino, la uva entraba por arriba y las botellas de vino salían por abajo. Además la bodega tenía un restaurante precioso en un edificio antiguo en el centro de Belgrado, con un jardín-terraza que era una delicia; y otro restaurante en Marbella, donde pase el verano de 2016 ayudando a introducir el vino en España y claro esta disfrutando de la Costa del Sol.
Periodo: Ago 2017-Actualidad
Bodega: Cooperativa Manjavacas (Mota del Cuervo, Castilla-La Mancha, España)
Vino Favorito: Selección Parcela Chardonnay

Después de muchos km recorridos, tocaba acercarme a casa y el destino me trajo a Mota del Cuervo. Un lugar limítrofe, en todos los sentidos, geográficamente se tocan las provincias de Cuenca, Ciudad Real y Toledo, y casi roza la provincia de Albacete; desde la colina que domina el pueblo, donde se ubican sus famosos molinos Manchegos, se divisa una llanura infinita que alberga el viñedo más grande del mundo; esta misma colina también es el límite entre dos tipos de terroir, ya que a partir de esta colina comienzan las primeras estribaciones de la sierra de Cuenca, se acaba la llanura manchega y los viñedos se ubican en otros tipos de suelos con pendiente y a mayor altitud. Manjavacas me ha dado mucho, estamos hablando de una bodega donde se procesan 60 millones de kilos de uvas todos los años, y me enfrento a retos que nunca antes había afrontado, además de ver una realidad del mundo del vino que no había visto en toda mi carrera. Mota del Cuervo también me dio, a parte de los amigos, a los 6 meses de estar aquí conocí a Cris, mi pareja; sabía que quedaba Mota para rato...; de este modo, pensé que estaba en el sitio correcto para ver cumplir mi gran sueño, pero viendo que el Betis no ganaría la liga, me lancé a por mi otro gran sueño, el que me acompañó durante tantos largos días de vendimia a lo largo de este viaje, hacer realidad los vinos que siempre imaginé bajo la marca Villa Iulia.